lunes, 6 de julio de 2015

Si me quisieras.

Si realmente me quisieras me habrías echado de menos cada día. Habrías entrado aquí, al menos una vez a la semana, a lamerte las heridas con mis palabras. Si realmente me quisieras aún pensarías, como mínimo, una vez al día, en mí. Si me quisieras sería sencillo mirarme y confiarme tus más callados secretos. Seguirías contando conmigo al contar con alguien. Si me quisieras, cualquier pareja te recordaría a lo fácil que resultaba ser feliz cuando estábamos juntos. Pensarías en cualquier momento absurdo y te reirías en silencio,o por el contrario, un momento perfecto te arrancaría una lágrima. Si me quisieras las noches se convertirían en algo que matar lentamente, con cualquier videojuego o película. La ventana solo te llevaría a una luna que ahora, ajena a todo, te respondería en silencio con el brillo de mi sonrisa.
Si me quisieras, ahora mismo, quizá, podrías estar leyendo esto. Y preguntarte por qué decidiste irte, por qué dejé que lo hicieras, y en qué clase de monstruos nos convertimos como para que se nos hiciera tan fácil seguir pegados. Seguir anclados al mismo mar. Compartiendo el dolor y la alegría,como hacíamos entonces.
Si me quisieras, tu cama me echaría en falta. Y recordarías momentos, extrañarías mi piel. Te refugiarías en recuerdos que solo son nuestros. 
Si me quisieras el verano se te haría pesado. El más caluroso de tus veinte primaveras.
Si aún quedará en ti alguna pequeña partícula de mí, quizá te dolería leer que no ha pasado un solo día en el que no me haya planteado cómo sería mi vida si siguieras aquí.
Si te duele ese 'feliz cumpleaños' que ya jamás tendré por esos diecinueve inviernos que cumplí, y sientes que se te quema la piel al recordar lo diferente que habría podido ser nuestra vida, entonces quizá es que mis cenizas aún siguen prendiéndose cuando algo sopla fuerte hacia tu recuerdo.
Si realmente me quisieras sabrías que existen muchas noches perfectas en el mundo y que probablemente un día alguna noche superará lo que ninguna ha conseguido aún: Un San Juan que no necesitó fuegos artificiales para encendernos la vida.

Si me quisieras me habrías buscado entre la gente algún día,
esperando ver en mis pupilas la respuesta a todas esas preguntas
que no supiste, ni supimos, responder.

Si me quisieras tu boca aún tendría restos del invierno que te regalé.
Si me quisieras, quizá, entonces, sabrías que nadie ha vuelto a pisar tan fuerte este suelo. Que no se han vuelto a caer mis paredes desde que destruimos el cielo.  Si me quisieras entenderías que aunque hayan pasado 187 días desde que te fuiste, para mí solo ha pasado una hora. Porque el tiempo empezó a avanzar tan lentamente que no he salido de diciembre y me sigue oliendo a dolor el silencio que amenaza con hundirme. 
Si me quisieras, me querrías tan fuerte, que la impotencia se acomodaría cada noche en tu almohada, recordándote que no estoy aunque esté.

Si me quisieras quizá algún día vendrías a salvarme de esta condena a la que llaman libertad, ahora que en mi bandera ya nadie lee tu nombre.
Presa del invierno te digo adiós, con la esperanza de que me reproches
que no quieres que me vaya
aunque no irme implique
quedarse contra el muro.
Aunque a quemarropa
el silencio se acomode 
entre tus ganas de irte
y mis ganas de quedarme.
Si me quisieras entenderías esto solo como algo que escribo cuando no quiero entenderme.
Si me quisieras me querrías tanto que no podrías dejarme en silencio
y volverías a buscar los pedazos que quedaran de mí.
Quizá si me quisieras me llamarías amiga, por etiquetar la vida que te entregué en mano.
El destino amenazará con rompernos cada vez que nos vea felices riendo
recordando que somos todo dentro de un nada que nosotros mismos construimos.


Ojalá me hubieras querido.
O mejor dicho: Ojalá no hubieras dejado de hacerlo.
Aunque si aún me quisieras,
no haría falta
decirlo,
supongo que lo sabrías
y las palmas de mis manos jugarían a encontrar tu hielo
y derretirlo.
Como siempre he hecho,
como siempre has querido.
Tu cuerpo contra mi cuerpo
deshaciendo las leyes
rompiéndonos las pieles
encontrando en amaneceres
las noches más bonitas.




Mayores secretos.
Adolescentes jugando a ser adultos.
Así te quise.
Y así me habrías querido, si por casualidad, aún me quisieras. 
















¿Por qué esta canción dice todo lo que yo te cantaría?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Lo sospechaba hasta que lo sentí, y lo sentí hasta que lo supe

 Lo sospechaba hasta que lo sentí, y lo sentí hasta que lo supe. Así empezó y acabó nuestra historia. Si sólo me hubiera fiado un poquito má...