domingo, 21 de noviembre de 2021

Tonterías

 En realidad no importa el tiempo que pase, siempre siento que en algún momento estoy al borde del abandono. Como si al marcar tu piel una sola vez con un adiós punzante estuvieses condenada para siempre a esperar (casi con certeza) el momento en el que vuelvan a herirte. 

Nada nos deja intactos. El dolor nos hace crecer, pero también nos enseña nuestras mayores debilidades. Y una vez las conocemos, es difícil alejarnos de ellas. 

Ya me gustaría

 Es casi inconsciente este pensamiento recurrente que me atraviesa. Me cuento y les cuento que no es para tanto y lo cierto es que soy dos p...