martes, 31 de diciembre de 2013

Has sido increíble 2013; hola 2014, tú también prometes.







 Este año ha sido increíble. He amado, llorado, echado de menos, cabreado, sonreído, bostezado, comido, dormido, caminado, corrido, soñado...he escrito (he abandonado esto un poco, la verdad), y he alimentado mis ilusiones.
Empezó no prometiendo mucho con ese enero frío en el que cumplí los 17. Mi vida en ese momento acababa de desmoronarse, dos personas a las que quería muchísimo habían dejado de hablarse. Había perdido al niño más bonito y más dulce que había conocido, y por si fuera poco echaba de menos a mi mejor amigo, aquel con el que en 2012 había metido la pata. El día de mi cumpleaños pedí tres deseos: Que ellas volvieran a hablarse, recuperar a mi niño y recuperar la confianza y el perdón de mi mejor amigo.
No todo llegó seguido, pero lo cierto es que en marzo le recuperé. A Raúl, al sentido de todos esos atardeceres que había observado, taciturna, esperando encontrármelo en cada calle que cruzaba. Me até a personas que había conocido aquel año, como Ana, con la que tuve conversaciones más profundas y sinceras que con nadie más.


  Seguí uniéndome a esas personas con las que había crecido año tras año. Mi infinita Belén.                            


Recuperé a mi mejor amigo, y a su pasividad, a su comprensión. A ese perdón tan esperado. Recuperé a un gran amigo y sobretodo un gran hermano. 

                                             
                                    Recordé esos diecisiete como algo que me ayudó a crecer y a comenzar a entender un poco más la vida.



Y volvíamos a estar todos unidos.


 Tuve mis más y mis menos con mi mejor amiga, aunque noté como la distancia poco a poco iba creciendo un poco más.




A pesar de eso volvimos a estar todos juntos y por fin ellas dos volvieron a hablarse.




 Y por último pasé el verano más mágico de toda mi vida...Compartiendo momentos y risas, íntimos secretos y abrazos. Dándonos todo lo que teníamos sin pedir nada a cambio. Lágrimas y sonrisas y esa pasión desenfrenaba que anunciaba que poco a poco me iba enamorando más y más de él.








He aprendido bastantes cosas, pero no tanto como me habría gustado.Aunque sí puedo decir que ha sido uno de los mejores años que he vivido nunca...Y que espero que el 2014 venga cargado con más sueños que nunca. Porque me siento preparada para afrontar mis 18 y todo lo que venga.

1 comentario:

Ya me gustaría

 Es casi inconsciente este pensamiento recurrente que me atraviesa. Me cuento y les cuento que no es para tanto y lo cierto es que soy dos p...