A veces el camino se les hizo duro; algunas cosas no fueron fáciles. Ellos no eran como los demás y tenían que aprender a asumirlo. Les costó esfuerzo llegar hasta donde otros llegaban solo dando un pequeño salto...pero cuando llegaban, cuando alcanzaban cualquiera de sus metas, os juro que entonces, eran los más felices del planeta Tierra. Porque no les importaba ser tan distintos, no les importaba soñar o no despiertos, andar o no con los ojos vendados, lo único que les importaba es que estaban juntos en esto. Que nunca se habían dado por vencidos. Que nunca se habían abandonado, y que nunca podrían hacerlo.
jueves, 5 de septiembre de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ya me gustaría
Es casi inconsciente este pensamiento recurrente que me atraviesa. Me cuento y les cuento que no es para tanto y lo cierto es que soy dos p...
-
Siempre estaré dispuesta a hacerte sonreír. Por muy duro que sea el día. Siempre querré cambiarlo a mejor. Porque te quiero y los ángeles...
-
Si algún día te preguntan por mí no les digas nada. Solo sonríe, asiente y di: Sí, la conocí. No les hables de lo feliz que te hice, ni si ...
-
Ahora sé que jamás debí dejarte entrar. Tenía razón, yo tenía razón. Aquel día comiendo, te miré a los ojos y te dije que no confiaba en ti,...
No hay comentarios:
Publicar un comentario